El pleito entre Luis Armando Melgar y Gerardo Fernández Noroña escaló en X. Entre acusaciones, casa en Tepoztlán y viajes, la austeridad vuelve a estar bajo lupa.
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El choque subió de tono en X. Luis Armando Melgar llamó “gusano hipócrita” a Gerardo Fernández Noroña y cuestionó su “vida de lujos”.
Noroña respondió en caliente. Además, exigió denuncias formales y adelantó que revisará la declaración patrimonial de Melgar.
Mientras tanto, reapareció Tepoztlán. El senador reportó una casa valuada en 12 millones de pesos y aseguró que fue comprada con crédito.
Sin embargo, el crédito no ha sido explicado con detalle. Por ello, crecieron las dudas sobre el origen de recursos y la transparencia.
Asimismo, las críticas abarcan sus viajes. En marzo voló en clase business a Francia y el costo desató otra ola de cuestionamientos.
Después, fue captado descendiendo de un avión privado durante una gira por Coahuila. Entonces, la austeridad volvió al centro del debate.
Luego, Noroña ironizó diciendo que Ricardo Salinas Pliego pagó ese vuelo. No obstante, el empresario lo desmintió públicamente y exigió una disculpa.
La austeridad fue puesta en duda por sus propios actos. Aun así, el legislador insiste en que los traslados son necesarios para su trabajo.
En contraste, Melgar se comparó con “millones de mexicanos” que viven de su trabajo. Además, pidió explicar el patrimonio y los lujos.
Por otro lado, el episodio evidenció tensiones en la 4T. También mostró que el discurso choca cuando las imágenes cuentan una historia distinta.
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Al final, esto no va solo de tuits incendiarios. Va de austeridad, patrimonio y congruencia entre lo que se dice y lo que se hace.
En suma, la explicación completa sigue pendiente. Mientras tanto, crecerá el escrutinio ciudadano sobre gastos, vuelos y bienes.
Porque, al final, claridad mata especulación. Y en política, la confianza se construye con datos, no con bravatas.
Además, los números presionan el relato. Un boleto en clase business puede rondar entre 60 y 70 mil pesos por tramo, según tarifas públicas recientes.
Asimismo, rentar un avión privado suele costar miles de dólares por hora. Por eso, la narrativa de austeridad se tensiona cuando aterriza en facturas reales.
Por último, Noroña retó: “presenten la denuncia”. A su vez, Melgar anunció que revisará patrimonios y gastos. Así, el choque político apenas comienza.
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